¿Es oportuna la mediación ambiental
en tiempos de crisis?
Decididamente sí.
La mediación se ha abierto camino en
las últimas décadas paso a paso, desde distintos ángulos y en base
a un importante esfuerzo de profesionales y asociaciones que han
tratado de encontrar su espacio frente a la inercia que conduce a los
juzgados, a presentar una denuncia.
En esa evolución lenta estábamos cuando hemos entrado en una
profunda crisis económica, social, política....
Según nuestras reflexiones, utilizar
la mediación es ahora doblemente oportuno. ¿Por qué?
Porque un proceso de mediación es más
económico, en general, que un proceso judicial. Es más económico
en dinero, en tiempo, en costes sociales, en movilización de
recursos... A nivel social y político también es pertinente porque
en un proceso de mediación los grupos humanos implicados en el
conflicto -son la parte principal del mismo- no pierden -en ningún momento- el control de la situación, y en tiempos de crisis es
importante significar los instrumentos que dignifican y favorecen el
control de nuestras vidas. En tiempos en los que la prima de
riesgo es primera noticia en los
telediarios; en tiempos en los que la susceptibilidad, la
sensibilidad, parece que es patrimonio de los mercados, es
importante -para muchas personas y asociaciones- recuperar los
espacios que realmente importan. Y, sin duda alguna, el medio
ambiente es uno de ellos.
No nos cansamos de matizar que no
todos los aspectos de un conflicto ambiental son mediables, que sólo
nos referimos a los que sí lo son. Los delitos ecológicos los
dejamos en los tribunales de justicia y consideramos que solo algunos
aspectos de estos conflictos pueden ser gestionados desde la
mediación.
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